La heparina es un fármaco anticoagulante utilizado principalmente para prevenir y tratar la trombosis venosa. Son fármacos que llevan más 25 años en el mercado, y han demostrado ser eficaces y seguros para el paciente. Algunas de las heparinas incluso se utilizan en el tratamiento de la trombosis arterial de los pacientes con síndrome coronario agudo.
Estos fármacos van dirigidos a reducir la capacidad de coagulación de la sangre en situaciones donde el organismo coagula en exceso. De este modo, se puede evitar la trombosis venosa o, en el caso de que la trombosis ya esté presente, se puede frenar el crecimiento del trombo en la vena, evitar que se rompa y prevenir la embolia pulmonar, u otras secuelas.
La heparina fue descubierta por Mclean en el 1916 en el curso de unos estudios que estaba llevando a cabo con células del hígado. Posteriormente, Howell en 1918 describió cómo obtener la heparina así como sus propiedades, y acuñó el término '' heparina'' que viene del nombre en latín de hígado, hepar. Fue a partir de los años 30 cuando distintos grupos investigadores realizaron diversos ensayos clínicos en humanos que han hecho que la heparina sea hoy en día un anticoagulante de primera elección.